sábado, 19 de noviembre de 2011

jueves, 17 de noviembre de 2011

Iglesia románica



En el siglo XI comenzaron las perigraciones en Europa. La Iglesia romanica eran lugares donde los peregrinos puedían descansar. El suelo tiene forma de cruz latina, ya que simbolizaba el cuerpo de cristo en la cruz, el lugar que se cruzaban los dos brazos de cristo llamado el crucero, cubierto con una cúpula alzada sobre un simborrio.
Bóvedas de cañón: las características más sobresaliente de la arquitectura románica es la construcción de edificios abovedados, con una doble finalidad: construir edificios más resistentes al fuego y con mejor acústica.
Arco fajón: para evitar el desplome de la bóveda, por su mayor peso, adoptaron como suloción fragmentarla mediante arcos fajones.
Pilares: loa arcos fajones se apeaban sobre pilares, con lo que se podía elevar la altura y aumentar la longitud
de la construcción.
Abocinamiento: A causa del elevado peso de la bóveda, se hacen muros muy gruesos, con pocos huesos, que en general, son estrechos y de forma abocinada, con derramehacia dentro para extender mejor la luz.
  Los capiteles obedecen a varios tipos.El corintio alcanza un sinfín de modaledades, pero el tipo más característico es el historiado.
los capiteles
                                                                                    

viernes, 4 de noviembre de 2011

La sociedad medieval

   MONASTERIO
   Soy Maroua, una mujer de un humilde campesino, mi marido y yo vivimos en una casa que pertenece a la monasterio, en Limos, Francia. Mi esposo la construyó con sus propias manos. Está echa por postes verticales, unas tablas y paredes de mimbres cubiertas con una capa de barro. El techo está cubierto con hierbas, cañas y carrizos, en el medio hay un agujero para la salida del humo del hogar. El suelo es de tierra apisonada. Vivimos solos ya que no tenemos hijos.
Trabajo con mi marido en el campo, trabajar en el campo es muy duro, empezamos desde que se amanece hasta
 que se pone el sol. Estamos cultivando las tierras, tenemos que arar, sembrar, recolectar y trillar. A una parte de la tierra la echa semillas en invierno, otra tercera parte cultivo de verano y la tercera parte restante la dejamos descansar todo el año. Es allí a donde llevamos a pastar a nuestro ganado. En nuestra pequeña huerta sembramos coles y guisantes, judía y algunas verduras y cebada para los caballos del gobernador. Las cosechas son muy escasas, si plantamos un celemín en el mejor de los casos obtenemos tres. Sólo contamos con hoces pequeños, para hacernos una guadaña necesitaríamos una cantidad mucho mayor de hierro y eso es un lujo que no podemos permitirnos. Espero que este invierno no llueva, que la tierra no se podía arar de blanda que está, no quiero pensar en el hambre que pasaríamos.

CATEDRAL
Recuerdo la llegada de un albañil al pueblo, procedente de Estrasburgo en busca de trabajo. Trabajaba en la construcción de la catedral. Nos contaba que allí vivía en barracas y convivía con los canteros, verdaderos artistas. También con los herreros, que mantenían en pie la catedral. Sus historias eran increíbles y aunque trabajaban sin cesar, domingos y festivos podían descansar.
A veces las mujeres tienen que ayudar en la siembra y en la recolección de las cosechas. Con ocasión de la matanza nos reunimos todos.
A veces matamos en la primavera y en ese caso hay que adobar y salar la carne rápidamente para que no se estropee al llegar el verano. Por lo tanto, es mejor hacer la matanza en otoño para
tener suficiente grasa y carne durante el invierno, una estación en que escasean las demás cosas de comer.
La matanza, pues, se celebra como una gran fiesta que se aprovecha para llenarse bien la panza.
El mercado siempre es una distracción por que llega gente de distintos lugares, comerciantes con productos de sus pueblos: cántaros de barro, platos de madera, cuchillos, paños y mantas. Nosotros vendemos: huevos, frutas, cochinillos y jabón. De ese modo conseguimos tener algún dinero disponible que, por lo general, no nos gastamos sino que lo guardamos en una vasija que escondemos bajo el suelo de tierra de nuestra choza. Los días de mercado se juega mucho a los dados, por eso el gobernador castiga con dureza a aquel que se atreve a hurtar.
En estos días ha llegado un hombre al pueblo que se llamaba Martín, uno de los hombres del séquito de un noble sajón. Nos contó que va de peregrinación a Santiago en nombre de su señor, que lo echaron de la comunidad cristiana, la llamada excomunión, impuesta por el Papa. Por que mató a un vecino en una pelea. Si está arrepentido hacía penitencia y peregrina a la tumba del apóstol Santiago, vuelve a formar parte de la excomunión cristiana. Ha parado aquí en Limos y después continuará su viaje hacia Pamplona, Burgos, León y finalmente Santiago.
Martín aprovecha este peregrenación para conocer el mundo, viajar y ganar dinero. Las creencias religiosas de la comunidad cristiana sobre el cielo y el infierno, dicen que el cielo está lleno de felicidad y el infierno es cruel, terrón fico lleno de sufrimientos. Tambien dicen que después de la muerte habrá un juicio final que se decide si vamos al cielo o al infierno.